El Empresario Catalán en general es individual y desconfiado, procede de fortunas campesinas, donde el que no era el "Hereu", se le mandaba a la Ciudad a estudiar. El Empresario Vasco es distinto, está acostumbrado a afrontar proyectos de más largo alcance, sabe formar núcleo con sus empleados alrededor de la Producción; y la Empresa sigue uniéndolos fuera de la jornada laboral . La pandilla es capaz de formar grandes cooperativas. Me atrevo a decir que ETA y los JESUITAS vivieron esas virtudes en sus inicios.
Cada Empresario recoge el sustrato de su tierra y gentes donde vive, y parte de una cultura. Andalucía es un terreno poco dado a la Industria, su tradición, su sol y su informalidad ( por entender otra forma de vivir ), hacen que no florezcan demasiadas Empresas.
Cada Empresario recoge el sustrato de su tierra y gentes donde vive, y parte de una cultura. Andalucía es un terreno poco dado a la Industria, su tradición, su sol y su informalidad ( por entender otra forma de vivir ), hacen que no florezcan demasiadas Empresas.
En Madrid el Empresario cierra los negocios basándose en las relaciones personales, es simpático; cerca de los Ministerios tiene otra visión. Es por eso que Madrid para los Catalanes es siempre una asignatura pendiente.
Pretendemos coger el puente aéreo con billete de ida y vuelta en el mismo día y cerrar el trato.